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Este dispositivo de última generación integra la tecnología USB 3.0 para la transferencia de archivos, lo que se traduce en una velocidad de hasta 100 Mb por segundo o lo que es lo mismo: una rapidez mayor que si se hiciera con USB 2.0, siendo, además, compatible con éste.

Así, utilizarlo es tan sencillo como conectarlo con el cable USB 3.0 y de forma automática empieza a transferir archivos a una gran velocidad, ya que no requiere de software adicional.

¿Memoria SSD o disco duro?

Este dispositivo de almacenamiento de TDK, a diferencia de los discos duros, carece de componentes mecánicos móviles y en su lugar emplea memoria no volátil NAND flash.

Esta tecnología se traduce en una mayor resistencia ante los golpes, las caídas y las vibraciones. Pero, además, hace que la velocidad de transferencia se multiplique hasta tres veces, permitiendo el acceso a la información almacenada de forma inmediata. A su vez, su nivel de ruido es muy bajo y consume mucha menos energía que otras soluciones de almacenamiento.

Con ella a todas partes

Perfecta para llevarla siempre en la maleta, esta memoria SSD se caracteriza por contar con unas medidas de tan solo 95 x 52 x 9 mm y un peso de apenas 45 gramos, cualidades que hacen que sea de lo más portable.

Compatible con los sistemas operativos de los entornos PC y Mac, se alimenta cuando se conecta al equipo a través de puerto USB.

Finalmente, se encuentra disponible en dos capacidades, 128 y 256 Gb, y se puede adquirir en una de estas tonalidades: blanco o negro brillante.

Fuente: http://www.noticiasdot.com/